Jueves 09 de Octubre del 2025

Coaching Organizacional y Ejecutivo: una herramienta ¿poco explorada?

En tiempos donde las organizaciones invierten millones en transformación digital, nuevas metodologías y sofisticadas herramientas […]

Publicado el 27/08/2025 por Silvina Demattei

En tiempos donde las organizaciones invierten millones en transformación digital, nuevas metodologías y sofisticadas herramientas tecnológicas, existe un recurso silencioso —y, paradójicamente, el más determinante— que sigue siendo subestimado: el desarrollo humano.

El coaching organizacional y ejecutivo no es simplemente un “acompañamiento blando” ni una moda pasajera de management. Es, en realidad, la arquitectura invisible que habilita a que la estrategia suceda, que los equipos funcionen con agilidad real y que los líderes encuentren la lucidez necesaria para tomar decisiones en medio de la complejidad.

Más que desempeño: una transformación de mentalidad

El coaching organizacional apunta a la eficacia sistémica: ayuda a que los equipos destraben fricciones, alineen propósito con resultados y transformen la cultura del “cumplimiento” en la del “compromiso”. El coaching ejecutivo, en cambio, opera en un nivel profundamente estratégico: conecta al líder con su capacidad de influencia, lo desafía a soltar automatismos y lo alinea con un liderazgo consciente, capaz de sostener organizaciones adaptativas y sostenibles.

¿Por qué ahora?

En la era de la hipercompetitividad, donde lo técnico se vuelve rápidamente obsoleto, la ventaja competitiva ya no está en el conocimiento que se acumula, sino en la forma en que líderes y equipos piensan, conversan y deciden juntos.

El coaching, lejos de ser un “beneficio extra”, es la inversión que permite a las empresas navegar la incertidumbre sin fracturas internas, potenciando la innovación, la resiliencia y la velocidad de respuesta. Hablamos de avanzar hacia un Liderazgo evolucionado donde los ejecutivos dejan de “dirigir” para empezar a “facilitar” la transformación.

Conclusión

El coaching organizacional y ejecutivo no es un lujo ni una moda, es la infraestructura humana de la estrategia. En un contexto donde los negocios se redefinen a velocidad exponencial, las empresas que lo entienden marcan la diferencia: no solo sobreviven, sino que prosperan. Quizás la verdadera pregunta no sea “¿podemos invertir en coaching?” sino “¿podemos permitirnos no hacerlo?”.

Silvina Demattei, Abogada, Consultora en Transformación Organizacional y Coach Ejecutiva

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